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9 de enero de 2012

Mi mamá me mima.


De como escribir la mejor primera historia del año y no morir en el intento.
Se me ocurre que la mejor primera historia del año, sea ni más ni menos que para mi mamá.
Un 9 de enero de un año cualquiera, nace la más pequeña de las hermanas, en una tierra castellana cualquiera. -Veintidós- años y un mes mas tarde, nazco yo. Dicen las buenas lenguas, que una fotocopia de "la mia mama". Desde niña siempre me ha encantado el número -veintidós-, quizás , tal vez, quién sabe,  hoy acabo de encajar una de mis piezas. Nunca es tarde si la dicha es buena. Hablando de dichas y de buenas, cualquiera que la conozca, sabe que es de ese tipo de personas a las que deberíamos poner un monumento o una calle con su nombre. Ella es una pequeña gran mujer, generosa, luchadora dónde las haya y un culo inquieto. 
A mi mama le gustan las casas de muñecas, las golosinas y el chocolate, la fruta, el queso y el café, es amante de los animales y sabe disfrutar de las flores de su jardín. Le encanta viajar. Es dulce, sensible y muy fuerte a la vez. 
Es la que está siempre para todo, la que escucha sin juzgar, con la que me voy de compras, mi madre, amiga, y para otros, mi hermana mayor.
Mi mama tiene una bonita sonrisa y en ocasiones sueña, por ejemplo, con viajar a Egipto.
Yo a la vez sueño con llevarla algún día y visitar con ella las pirámides y la tumba de Tutankamón.
Me gusta viajar con ella. Es una suerte tener un hermano artista, porque así visitamos muchos países para ver sus espectáculos.
En una de nuestras visitas al circo y a los quesos de Suiza, conocimos a un egipcio, que nunca había salido de su casa. Él se encontraba sólo en ese lejano país y al encontrarnos, nos bautizó como su segunda familia. Ahora nos escribe desde el desierto donde vive, para que vayamos a visitarlo. Tal vez, quizás, quién sabe, el sueño de Egipto se cumpla algún día.
Mamá, para tí, cuida este árbol que te representa.
Tú eres la base y nosotros dos, las ramas que te abrazan.
Ahora deja crecer tus sueños, como las verdes hojas y las flores de tu jardín.
No podemos vivir si tí... No hay manera.
Te queremos. Por siempre y para siempre.

De grandes madres, sueños y árboles pequeños.

Texto: Nadia Del Arte y demás familia.
Fotografia: Nadia Del Arte.

1 comentario:

  1. Esta muy bien el blog, no lo conocía hasta ahora, me pasaré más a menudo a leerlo. Aprovecho para felicitarte el 2012, un saludo!!

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